TRANSCRIPCIÓN DE LA HISTORIA DE JOSÉ RIVERO

Hoy en Almas Creativas, quiero presentarte a José Rivero, un alma sensible, llena de vida, de curiosidad, ilusión y amor por la moda, un mundo que descubrió, y que le apasionó siendo un niño.  

José, no es solo un diseñador, es un soñador que crea belleza y  con su arte transforma vidas. 

Sus diseños son una filosofía de vida: crear piezas que perduren en el tiempo, que embellezcan sin perder su esencia, que eleven la autoestima de quienes las usan y que, sobre todo, respeten la identidad de quien las lleva.

Nació un 18 de Julio en Cabezón de la Sal, un tranquilo pueblo de Cantabria. Con 7 años, se quedó sin padres, y su tía Amparo, se convirtió en su segunda madre. Comenta que se ha sentido un niño mimado, querido por su familia, que ha sido el “hijo ideal”, sentía que debía algo, que no podía portarse mal. 

Es nieto, hijo, sobrino, hermano y primo de carniceros, nada que ver con el mundo de la moda. 

Desde pequeño tuvo claro que  le gustaba el diseño, cuando salía de la escuela se pasaba horas jugando solo con las nancys  que había heredado de sus hermanas y primas, dejaba  volar su imaginación, y creaba  con sus manos preciosos vestidos para sus muñecas. 

Tímido, prudente y respetuoso, muy racional y práctico, con un mágico toque de locura creativa.

Recuerda que le encantaba dibujar, recortar fotos de revistas, aprendió a hacer punto con sus tías, y un verano, se apuntó a una academia de su pueblo para que le enseñaran a coser, era el único chico en la academia. Se sentía diferente a los demás niños, pero no le daba  importancia.

Cuando terminó el instituto, decide irse a Barcelona a estudiar, siguiendo las recomendaciones  de su hermana  Coral, ella es pintora y había estudiado allí.  Le abrió las puertas a un mundo nuevo para él, en ese momento Barcelona se veía como la ciudad más cosmopolita de España, más abierta, más creativa, donde podría  desarrollarse como diseñador. A sus 18 años, José  era muy inocente y muy crío. 

Estudió en DOS escuelas de diseño a la vez, en la escuela pública de la Lonja, y en la Feli, una de las escuelas privadas con más prestigio del país. Comenta, que se dejó guiar por Coral, quien ha sido  su mayor apoyo siempre.  Que no entiende cómo fue capaz de estudiar en dos escuelas tan diferentes, dos mundos completamente opuestos. 

En la Feli, conoció a Julia y se hicieron muy amigos. Perfeccionó su técnica de coser, durante 2 años iba todos los fines de semana a su casa de Sant Boi de Llobregat. El domingo por la noche se volvía en el tren, con un traje nuevo, canelones en un Tapper que hacía la madre de Julia, y un aprendizaje que ha sido su vida. Está convencido que ahí se labró su futuro. 

Terminó sus estudios con dieces, el diseño estaba claro que era su pasión, estaba deseando comerse el mundo

Su inquietud y curiosidad le hacía seguir formándose;  escalado industrial de patronaje, estampación, escaparatismo, patronaje de zapatos, cosas que le podían aportar, a la vez iba haciendo sus primeros diseños, todo lo hacía él, patronaba y cosía todas las prendas. 

En navidades, se iba a Cabezón de la Sal y llevaba sus diseños para venderlos, a sus primos, hermanos, amigos, cuenta emocionado cómo organizó, sin darse ni cuenta dos desfiles, que fueron todo un éxito, llegando a llenar un polideportivo. Todo fluía. 

José, es una mente inquieta y creativa, tiene muchos proyectos en mente, uno de ellos es revivir ese desfile con los mismos protagonistas, volver a reunir a sus primeras modelos. ¡Seguro, que será muy bonito y emotivo el reencuentro! 

Sus primeros pasos fueron en mercadillos, y en una feria para jóvenes diseñadores,

pasó de vender 2 camisas el primer año que se presentó, a ser el más vendido en la siguiente edición, llegando a facturar 3000€ en un día + encargos 

A pesar de ser el nº1 en ventas, no recibió ni una felicitación por parte de los organizadores. Estaba empezando y echo en falta un enhorabuena.

A veces necesitamos que nos suban el ego. Que valoren y respeten nuestro trabajo. Cuando empiezas tienes inseguridades, te cuesta creer en ti y en darle valor a tu trabajo

Ánima a los jóvenes diseñadores, a que sumen siempre impar, les dice que sumen siempre 3 colores rojo/verde/azul, que se atrevan a hacer un trío. A ser diferentes, a tener su propia identidad, a sentirse únicos y especiales. A que aprendan, a decir NO. 

Cómo una hormiguita iba guardando el dinero que ganaba,  para invertirlo en comprar material nuevo.

Durante 2 años, dio clases en una academia de moda, enseñando el amor y la pasión que siente por este mundo a sus alumnos, inspirando y motivando a muchos de ellos. 

En ese momento los nuevos diseñadores no tenían donde vender sus creaciones, por eso él y otros jóvenes de su generación decidieron montar su propia tienda.

Con 25 años y muchas inseguridades, junto a dos compañeros con los que había estudiado, decide crear una sociedad;  Modar, donde vendían sus diseños.  

Dos años después y con mucha ilusión, abre José Rivero, su primera tienda en solitario, de la que guarda muy buenos recuerdos,  desde el escaparate se veía como trabajaba en el taller,  le encantaba. 

La relación  con sus socios no era buena, y decidieron disolver la sociedad.

En 1998, José abre su segunda tienda en la misma calle; Carrer d’Astúries nº 43, manteniendo su clientela. Si estás por Barcelona anímate a pasar por su tienda. Cada prenda es un reflejo de la esencia de José: piezas únicas, creadas con dedicación y pensadas para hacer sentir especial a quien las vista. Sus diseños son adaptables, transformándose según las necesidades y deseos de cada clienta, porque

José entiende que la moda debe ser una herramienta para empoderar, no para encasillar

Estuvo con 2 tiendas propias 5 años, en los que hubo, vacas gordas; donde ganó más dinero del que podía gastar, pero también las hubo flacas, después de 9 años, decide cerrar la 1ª tienda. 

La realidad a veces es muy frustrante, la creatividad no siempre vende.  Sus clientas son su mayor tesoro “veneradas a la vez que temidas”, recuerda cuando creó el pantalón palazzo, 3-4 clientas, le dijeron que era muy ancho, él dijo NO, es espléndido, tiene que verse espléndido, si  le quito volumen, se quedará pobre, y se quedará un quiero y no puedo. El empresario le decía al diseñador: José hay que estrechar ese pantalón porque las mujeres lo quieren más estrecho, al final de la tarde se impuso el DISEÑADOR. Decir NO y respetarnos es saludable, él está aprendiendo a ponerlo en práctica. 

Afirma, que el EQUILIBRIO está en buscar un diseño creativo y comercial. Que su valor son sus creaciones, poner su esencia a todo lo que hace. Su moda crea un estilo propio, es fácil, práctica, divertida y creada para embellecer. 

Reflexiona sobre la vida y la moda, asegura que ambas son cíclicas, llego de Cantabria vistiendo de negro, poco a poco se fue convirtiendo en un chico mediterráneo, llenando su vida de  color y luz. 

A veces piensa que se le ha terminado la creatividad, bromea con la idea de dejarlo todo y convertirse en barrendero. Pero siempre hay algo que lo devuelve a su pasión: como aquella vez que vino una mujer de Suiza, y se quedó prendada de una preciosa chaqueta azul con rayas y cuadros rojos, no se atrevió a comprarla, era demasiado llamativa para su país. A la mañana siguiente se pasó por la tienda, y le dijo que era la chaqueta más bonita que había visto nunca, se la llevó puesta, y desde el aeropuerto, le envió una foto con la chaqueta dándole las gracias por lo feliz que se sentía con ella.

Hoy, casi  30 años después de haber comenzado su carrera, José mira atrás con una mezcla de vértigo y orgullo.

Vamos tan rápido en la vida que a veces no nos damos cuenta de todo lo que hemos logrado, de cómo hemos ido construyendo la persona que somos hoy

Una frase de tacones lejanos de Almodobar que dice Marisa Paredes, (Antes era una joven absurda, ahora soy una gran dama de la canción española) 

A lo largo de su camino, ha aprendido que nadie te regala nada, que cada éxito viene acompañado de esfuerzo y cada fracaso es una lección disfrazada. Los años de experiencia le han enseñado que el éxito verdadero no se mide solo en cifras o en reconocimiento externo. Para él, el verdadero éxito reside en la satisfacción personal y en haber podido mantenerse fiel a sí mismo, a sus principios y a su estilo.

Sus clientas no son simples compradoras; muchas de ellas se han convertido en amigas, confidentes, y algunas incluso en fuente de inspiración para sus diseños. Esas relaciones, construidas a lo largo del tiempo, son el verdadero tesoro de su carrera.

«No se imagina una vida sin creatividad, sin telas, sin la posibilidad de hacer algo nuevo cada día». Y aunque a veces la inspiración parece que se escapa, encuentra su camino junto a su compañera fiel, su máquina de coser, que lo ha acompañado en los momentos más difíciles y que sigue siendo su mayor refugio.

Enhorabuena José, por  mantener viva  esa ilusión y curiosidad, por seguir siendo ese niño que era feliz jugando con sus nancys. 

Muchas gracias, por tu generosidad al compartir tu  bonita Alma Creativa,  por ser tan auténtico y especial, por regalarnos amor y vida con tus creaciones. 

Gracias por enseñarnos la importancia de decir NO, de ser fieles a nosotros mismos, de mantener viva la pasión por hacer las cosas bien, por buscar el equilibrio en nuestra vida. 

Texto y voz Mariví Porras www.tuamigaonline.com

Música Audionautix.com